En el fascinante mundo del yoga, se explora la intrincada red de energía que fluye a través del cuerpo humano. Según la filosofía del yoga y otras tradiciones orientales, se postula la existencia de canales energéticos llamados “nadis”. Estos nadis, análogos a los meridianos de la medicina tradicional china, constituyen una red sutil que conecta todo nuestro ser. En particular, tres nadis destacan en importancia: Ida, Pingala y Sushumna. Estos canales energéticos están estrechamente vinculados con los chakras, centros de energía ubicados a lo largo de la columna vertebral. En la práctica del yoga, se sostiene que el equilibrio y la libre circulación de esta energía vital conducen a la salud física, mental y emocional.
La energía fluye por estos canales, alimentando y conectando los distintos aspectos de nuestro ser. Ida y Pingala, representando las energías lunar y solar respectivamente, fluyen a lo largo de la columna, mientras que Sushumna se sitúa en el centro. Estos nadis y chakras forman un sistema interconectado que influye en nuestra vitalidad y bienestar. Los chakras, a su vez, son considerados como puntos fundamentales de concentración y distribución de energía. Cada uno de los siete chakras principales se asocia con diferentes aspectos de la experiencia humana, desde la supervivencia y la creatividad hasta la espiritualidad. En el yoga, se busca armonizar y activar estos centros para fomentar el flujo óptimo de energía.
En la filosofía del yoga, se considera que los bloqueos energéticos también influyen directamente en los órganos y sistemas del cuerpo. Los chakras, centros de energía a lo largo de la columna vertebral, se asocian con órganos y funciones específicas. Por ejemplo, el chakra del corazón está vinculado al sistema cardiovascular, mientras que el chakra del plexo solar se relaciona con el sistema digestivo. Cuando los nadis asociados a estos chakras se bloquean, se cree que la energía no fluye libremente, impactando en el funcionamiento saludable de estos órganos. Desbloquear los canales de energía es clave para vitalizar el cuerpo en su totalidad, proporcionando un enfoque integral hacia la salud y el bienestar.
El yoga ofrece un arsenal de técnicas efectivas para liberar la energía estancada y promover un flujo libre en el cuerpo y la mente. Estas prácticas, que incluyen posturas, respiración y meditación, desempeñan un papel vital en desbloquear los canales energéticos y fomentar un bienestar integral. Las posturas de yoga, conocidas como asanas, son fundamentales para desbloquear la energía. Cada posición específica trabaja en diferentes áreas del cuerpo, estimulando la circulación de energía y liberando tensiones acumuladas. Desde las posturas de flexión hasta las inversiones, cada asana contribuye a desbloquear canales y revitalizar el flujo energético.
La respiración consciente, o pranayama, es otra herramienta clave en la caja de técnicas de desbloqueo energético. Al controlar la respiración, se dirige la energía vital a través del cuerpo. Técnicas como la respiración abdominal profunda y la respiración alterna ayudan a despejar obstáculos energéticos, proporcionando una sensación de calma y vitalidad. La meditación, al centrar la mente y calmar las fluctuaciones mentales, juega un papel esencial en el desbloqueo energético. Al cultivar la atención plena, se disuelven bloqueos mentales y emocionales, permitiendo que la energía fluya sin restricciones. La meditación guiada y la visualización son prácticas valiosas para este propósito.
Pawanmuktasana, una práctica de yoga que va más allá de la superficie física, se sumerge en la liberación de bloqueos energéticos creando un impacto transformador en el cuerpo y la mente. Esta serie se divide en tres grupos de asanas, y nos enfocaremos en las del Grupo Antirreumático, diseñadas para liberar tensiones en las articulaciones. La filosofía subyacente de Pawanmuktasana reconoce que las articulaciones son puntos críticos donde la energía puede estancarse debido a la falta de movimiento regular. Al comprometernos con movimientos articulares específicos, buscamos desbloquear esta energía estancada y revitalizar la fluidez natural de la energia en todo el cuerpo.
Esta serie se hace sentados en el suelo pero lo vamos a hacer en la silla.
Dedos de los pies Mueves dedos hacia delante y hacia atrás inhalas hacia atrás, exhalas hacia delante
Tobillos Coloca el tobillo sobre el muslo contrario. Que el tobillo salga lo suficiente del muslo. Sostenga el tobillo con una mano y con la otra haz rotaciones al inhalar en un sentido y
Rodillas Doble la rodilla al exhalar y estírala al inhalar
Caderas coloca el pie sobre el muslo contrario, coloca la mano sobre la rodilla sostenga los dedos del pie con la mano. Inhalas rodilla hacia arriba, exhalas empujas rodilla hacia abajo
Dedos manos Abra las manos separando los dedos inhalando, cierre los dedos cerrando el puño con el pulgar hacia adentro
Muñecas Haz puño con las manos. Haz un círculo lo mas amplio posible. Inhala en un sentido, exhala en otro sentido
Codos Manos en hombros. Estiras los hombros al inhalar, exhala manos en hombros
Hombros Manos en hombros, junta los hombros por delante, haz círculos partiendo de hombros juntos y retornando a hombros juntos
Cuello giramos el cuello como diciendo que no. Barbilla alineada con el hombro
Sentir todo el cuerpo
